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no somos Frida y Diego
entre todas las cosas
que no somos ni seremos
no pasaremos una vida juntos
nuestra vida fue solo un mes
todo un mes
qué mes en que te amé
y tu me confesaste
"no se que es el amor"
qué mes
en que estuvimos frente a frente
desnudos entre la montaña y el río
con los pies entumidos sobre la roca
y un calor intenso en el vientre
los órganos hirviendo
echando humo por tocar y ser tocada
cuantas veces te miré
cuantas veces me hablaron esos ojos
yo creía entender
pero ya no tengo esos ojos
y tus palabras solo acusan
no seremos Frida y Diego
Diego la quería aunque no fuese buen hombre
tú
tan bueno como las ilusiones
me preguntas si yo creo que me quieres
digo que si
solo por sorprenderte
lloro y muero
sin beber ni fumar
ni ganas tener
si no ganas de ti
y no estas ni en mis sueños
el otro día te soñé
creo haberte soñado
verdaderamente, ya no recuerdo
qué debilidad es mi memoria
ante tus mil preguntas
ante tu insaciable apetito de saberlo todo
yo te advierto ingenuamente
"quizás no sea tan bueno como creemos"
pero ya no lo creo
tampoco te quiero
repito que tampoco te quiero ya
sigo queriendo al chiquillo
pero ya no eres tú
tú no me miras como él
tú no estas para mirarme
tú no me hablas con los ojos como él
no estas para hablarme
estas para dudar y cuestionar
descuidado y despreocupado
qué tragedia es
la pérdida de la ignorancia
ahora creo saber lo que tus ojos nunca me dijeron
las obscenas palabras
de vulgares pensamientos
que no hacen juego con mis recuerdos
de tu mirada humilde
te creí incomprendido
te creí el sol de mi soledad
pero mi soledad no tiene sol
Es un sol
es la luz de mi tierra
calor de mi alma
a veces no la siento
pero siempre vuelve
nunca me engaña
siempre vuelve
siempre es así
¿lo será siempre?
¿lo creerás, sol de mi soledad?
te creé en mi propia imagen
y me quedaste chico
sin embargo te quiero
como al perro vagabundo
que me ladra y se niega
a aceptar el pan que le ofrezco

te volveré a ver y no será igual
me mirarás avergonzado
cuando veas mis ojos
mas brillantes por cargar
la lagrima soberbia que se niega a caer
y te halles incapaz de querermecómo yo adoré esos hermosos charcos oscuros que me susurraron
no sabrá nadie
lo que ellos me susurraron